INGREDIENTES:
- Cebolla
- Pan del día anterior
- Aceite de oliva
- Rodajas de merluza
- Colorante
- Sal
- Orégano
- Vino blanco
- Sal
PREPARACIÓN:
Cortar mucha cebolla en rodajas finas y freírla con un chispa de sal. Reservar en un plato.
En ese mismo aceite freír las rebanadas de pan. Tantas rebanadas como rodajas de vayan a hacer.

Retirar el pan en un plato y quitar todo el aceite de la cacerola.
Poner el pan, encima de cada rebanada la cebolla y encima las rodajas de merluza.
Añadir un poco de sal, orégano, una chispitina de colorante y un vaso de vino blanco junto con una poquitín de agua.
Tapar y poner a fuego medio-alto, hasta que la tapa se caliente. Cuando la tapa esté caliente se baja al mínimo y se deja tapado hasta que el pescado esté hecho. No dejarlo demasiado para que no se pase el pescado.
En cuanto esté blanco el pescado, apagar el fuego. Depende del tamaño y grosor de las rodajas.
Hala, a disfrutar!!!!. Hacedlo porque os vais a chupar los dedos.